Hace unos días la cadena televisiva VH1 propaló un programa titulado "La ardiente vida sexual de las celebridades", donde se revelaba los secretos mejor guardados de la farándula norteameriacana.
Allí se dijo que Woody Harrelson, Sting, Tom Hanks y Hugh Jackman son adictos al sexo y practicantes de la ciencia sexual del Tantra; además del famoso Puff Daddy quien ha dicho que hizo el amor con su novia durante veintiocho horas seguidas, cosa un poco difícil de creer.
También se habló de un grupo de actrices que buscan placer con los famosos juguetes sexuales; entre las que se mencionó a Teri Hatcher, Jessica Alba, Kate Moss, Jamie Lynn y Michelle Rodríguez, quienes dijeron que compraban sus vibradores en el exclusivo y famoso local “Jimmy Jane”, donde cada uno puede costar varios miles de dólares.
Entre ellas estaba la sensual Eva Longoria que experimentar un enomre placer al imaginarse como una "ramera" y quien tiene un vibrador llamado "conejito" al que le tiene mucho cariño y que le costó 90 dólares.
Por su parte, el futbolista David Beckham le regaló a su mujer Victoria Adams un distintivo vibrador de platino sólido hecho a mano con una base de diamantes de diez quilates, del cual solamente se han fabricado diez y cuestan cada uno dos millones de dólares. En realidad, excentricidades difíciles de creer, pero que pueden tener algo de cierto.
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